martes, 29 de septiembre de 2015

Dibujitos por los chicos de 1ro A y B









Aprendiendo Sobre Animales...




Proyecto Cuentos Tradicionales...



ENTRENAMIENTO EN LECTO-ESCRITURA

CICLO LECTIVO 2015

PROYECTO DE GRADO:

“CUENTOS TRADICIONALES”

Actores involucrados:

 Docentes de primeros  grados ( ambos turnos y secciones), docente de plástica, docente de apoyo(Turno mañana), docente de tecnología( ambos turnos) maestra bibliotecaria( ambos turnos) facilitadora digital ( ambos turnos)


Destinatarios:

Alumnos de primeros grados turnos mañana y tarde; comunidad educativa


FUNDAMENTACION:

                Los cuentos tradicionales son historias contadas de generación en generación con el fin de desarrollar la imaginación y superar conflictos internos propios de cada niño.
                Como estos cuentos tienen finales felices producen cierta satisfacción en los niños que generalmente comparan las vivencias de los personajes con las propias.
                Leer, escuchar y escribir son acciones que el niño necesita para desarrollar su capacidad literaria, lingüística y creativa. La narración de cuentos, entonces, contribuye con la movilidad de sentimientos por parte de los niños con la activación de la creatividad y la vivencia de experiencias fantásticas.
Estamos convencidos que es fundamental que los estudiantes se familiaricen con este tipo de literatura ya que, a través de los relatos fantásticos dejan enseñanzas en valores y van introduciendo al lector en un mundo de imaginación, historias con conflictos, finales felices y mezcla de realidad y fantasía.
Para los estudiantes el poder participar de este proyecto ayudará a contribuir no solo en lo que refiere a la iniciación en la lecto- escritura sino que será altamente estimulante para contribuir en la formación personal mejorando la auto estima, el trabajo en equipo, el respeto por la opinión y el trabajo de sus compañeros, la perseverancia, la autocorrección, entre otros aspectos.
Este proyecto incluye a las familias a partir de la invitación a diferentes talleres con el fin de dotarlos de herramientas que los ayuden a poder acompañar a sus hijos en el proceso de enseñanza aprendizaje.



OBJETIVOS GENERALES:


    Formar parte de una comunidad de lectores y escritores a través de su participación sostenida en situaciones de lectura y escritura.

● Participar de una diversidad de situaciones que les brinden múltiples oportunidades para leer y escribir textos con propósitos significativos y diferentes destinatarios, preservando el sentido que estas prácticas tiene fuera de la escuela.
● Desempeñarse como lectores y escritores plenos desde el inicio de la escolaridad en un ambiente de trabajo cooperativo donde cada uno pueda enfrentar sin temor los desafíos de las situaciones de lectura y escritura porque el error forma parte del aprendizaje
. ● Constituirse como lectores de literatura, conociendo diversos autores y géneros y desarrollando un proyecto personal de lectura, que les permita conocer otros mundos posibles y reflexionar sobre el propio.
● Formarse como estudiantes que puedan recurrir a la lectura y la escritura como medios para acceder al conocimiento que se difunde en libros, revistas, Internet, entre otros portadores.


OBJETIVOS ESPECÍFICOS:

·        Motivar a los niños hacia la lectura de cuentos clásicos
·        Acercarse a la obra literaria como una forma de expresión artística
·        Iniciarse en la recreación y modificación de historias clásicas
·        Participar en las actividades relacionadas con la lectura y modificación de un cuento tradicional
·        Diferenciar las distintas partes del cuento
·        Potenciar la lectura expresiva
·         Participar de actividades de lecto-escritura mediante procesadores  digitales ingresando caracteres alfanuméricos, imágenes, gráficos, sonido, hipertexto, etc y modificando, corrigiendo o completando textos existentes
·         Participar en producciones visuales, musicales y/o teatrales utilizando procedimientos propios de los lenguajes artísticos
·         Valorar las producciones propias y ajenas
·         Apelar a la re lectura para sostener sus interpretaciones.


PRODUCTO FINAL:

·        Recopilado  de cuentos tradicionales
·        Galería artística: títeres, maquetas, láminas

·        Libro de adivinanzas  referidas a títulos de cuentos tradicionales y sus personajes

Actividades... Cuento Gusta Roldán

 


PÁJARO DE NUEVE COLORES

GUSTAVO ROLDÁN
                                                                                                                                                                                                             

 TRABAJO EN EQUIPO:


INTEGRANTES:



                                                                                                                                                                

ACTIVIDADES PREVIAS A LA LECTURA:


1-      Después de leer el título del cuento  contesten:
¿Qué tipo de texto les parece que es?
¿Por qué?

2-      Dibujen la tapa del libro como se imaginan según el tipo de texto que eligieron.

       3—Busquen  en distintos soportes y escriban  los aspectos que les resulten más importantes de la biografía del escritor.

       4-Ahora observen la tapa del libro, conversen con los integrantes del grupo y escriban que creen que relata el cuento.



Actividades primera parte del cuento 

“PÁJARO DE NUEVE COLORES”

1-      Subrayar en el texto leído las palabras de significado desconocido y
·         Buscar el significado de las palabras subrayadas en distintos soportes.
·         Escribir el significado de dichas palabras.

       2-Conversar con los integrantes del grupo y contestar:

·         ¿Dónde puede ubicar geográficamente este cuento? Pueden encontrar alguna sugerencia releyendo la biografía del autor o el hábitat en común de los personajes del cuento.
       3-Buscar en distintos soportes las características de la zona elegida para que transcurra el cuento y enumerarlas.

                 VOLVIENDO AL CUENTO:

          4-Ubicar en el cuadro los personajes del cuento:

                              PERSONAJES
PRIMARIOS
SECUNDARIOS





     TENIENDO EN CUENTA QUE:

Los personajes del cuento son animales  reales

5-BUSCAR EN DISTINTOS SOPORTES INFORMACIÓN SOBRE LAS CARACTERÍSTICAS DE LOS ANIMALES Y COMPLETAR UN CUADRO PARA CADA UNO.

6-En el punto 5 dibujaron los animales según  sus características particulares (imagen real).
  Elegir los materiales que prefieran y realizar dibujo o escultura  ( a elección del grupo) siguiendo las observaciones encontradas en los cuadros de Joan Miró. (pueden releer la ficha realizada sobre la pintura de Joan Miró).




NOMBRE

CLASIFICACION (según su estructura interna):

ESPECIE:

SE DESPLAZA:
TIPO DE REPRODUCCIÓN:
TIPO DE ALIMENTACIÓN:

Leemos por placer...





UN CUENTO PARA DISFRUTAR
SE QUEDÓ DORMIDO MI LIBRO DE CUENTOS
Y OCURRIÓ UN DESASTRE
EN UN SOLO MOMENTO


SE ESCAPARON TODOS:
LOS SIETE ENANITOS,
EL LOBO, LA ABUELA
Y LOS TRES CHANCHITOS

 


ALADINO DIJO:-ME ESCAPÉ SIN ROPA
LE ALCANZÓ UN ZAPATO
EL GATO CON BOTAS

EL PÁJARO AZUL Y EL PATITO FEO
SE ESCONDIERON JUNTOS
DETRÁS DE UN SOMBRERO

¿SABEN LO QUE HICE CUANDO ME ENTERÉ?
ME QUEDÉ TRANQUILA SENTADA

Y PENSÉ.

ME METÍ EN EL LIBRO,
LA VI TAN SOLITA
QUE CHARLÉ UN BUEN RATO

CON CAPERUCITA




BLANCANIEVES Y LOS SIETE ENANITOS

En un lugar muy lejano vivía una hermosa princesa que se llamaba Blancanieves
. Vivía en un castillo con su madrastra, una mujer muy mala y vanidosa, que lo único que quería era ser la mujer más hermosa del reino. Todos los días preguntaba a su espejo mágico quién era la más bella del reino, al que el espejo contestaba:
- Tú eres la más hermosa de todas las mujeres, reina mía.
El tiempo fue pasando hasta que un día el espejo mágico contestó que la más bella del reino era Blancanieves.
La reina, llena de furia y de rabia, ordenó a un cazador que llevase a Blancanieves al bosque y que la matara.
 Y como prueba traería su corazón en un cofre. El cazador llevó a Blancanieves al bosque pero cuando allí llegaron él sintió lástima de la joven y le aconsejó que se marchara para muy lejos del  castillo llevando en el cofre el corazón de un jabalí.

Blancanieves, al verse sola, sintió mucho miedo porque tuvo que pasar la noche andando por la oscuridad del bosque. Al amanecer, descubrió una preciosa casita. Entró sin pensarlo dos veces. Los muebles y objetos de la casita eran pequeñísimos. Había siete platitos en la mesa, siete vasitos, y siete camitas en la alcoba, dónde Blancanieves, después de juntarlas, se acostó quedando profundamente dormida durante todo el día.
Al atardecer, llegaron los dueños de la casa. Eran siete enanitos que trabajaban en unas minas. Se quedaron admirados al descubrir a Blancanieves.

 Ella les contó toda su triste historia y los enanitos la abrazaron y suplicaron a la niña que se quedase con ellos. Blancanieves aceptó y se quedó a vivir con ellos.
.
Mientras tanto, en el castillo, la reina se puso otra vez muy furiosa al descubrir, a través de su espejo mágico, que Blancanieves todavía vivía y que aún era la más bella del reino. Furiosa y vengativa, la cruel madrastra se disfrazó de una inocente viejecita y partió hacia la casita del bosque.

Allí, cuando Blancanieves estaba sola, la malvada se acercó y haciéndose pasar por buena ofreció a la niña una manzana envenenada.

Cuando Blancanieves dio el primer bocado, cayó desmayada, para felicidad de la reina mala. Por la tarde, cuando los enanitos volvieron del trabajo, encontraron a Blancanieves tendida en el suelo, pálida y quieta, y creyeron que estaba muerta.
Tristes, los enanitos construyeron una urna de cristal para que todos los animalitos del bosque pudiesen despedirse de Blancanieves. Unos días después, apareció por allí unpríncipe a lomos de un caballo. Y nada más contemplar a Blancanieves, quedó prendado de ella.
Al despedirse besándola en la mejilla, Blancanieves volvió a la vida, pues el beso de amor que le había dado el príncipe rompió el hechizo de la malvada reina. Blancanieves se casó con el príncipe y expulsaron a la cruel reina del palacio, y desde entonces todos pudieron vivir felices.



CAPERUCITA ROJA

En un bosque muy lejos de aquí, vivía una alegre y bonita niña a la que todos querían mucho.
Para su cumpleaños, su mamá le preparó una gran fiesta, la niña jugó, bailó, sopló las velitas, comió tarta y caramelos. Y como era buena, recibió un montón de regalos.
 Pero su abuela tenía una sorpresa: le regaló una capa roja de la que la niña jamás se separó.
Todos los días salía vestida con la caperuza. Y desde entonces, todos la llamaban de Caperucita Roja.
 Un día su mamá le llamó y le dijo:

- Caperucita, mañana quiero que vayas a visitar a la abuela porque está enferma. Llévale esta cesta con frutas, pasteles, y una botella de vino dulce.
A la mañana siguiente, Caperucita se levantó muy temprano, se puso su capa y se despidió de su mamá que le dijo: 

- Hija, ten mucho cuidado. No cruces el bosque ni hables con desconocidos. Pero Caperucita no hizo caso a su mamá. Y como creía que no había peligros, decidió cruzar el bosque para llegar mas temprano.

Siguió feliz por el camino. Cantando y saludando a todos los animalitos que cruzaban su camino. Pero lo que ella no sabía es que escondido detrás de los árboles, se encontraba el lobo que la seguía y observaba. De repente, el lobo la alcanzó y le dijo:
- ¡Hola Caperucita!

- ¡Hola señor lobo!
- ¿A dónde vas así tan guapa y con tanta prisa?
- Voy a visitar a mi abuela, que está enferma, y a la que llevo frutas, pasteles, y una botella de vino dulce.
- ¿Y dónde vive su abuelita?
- Vive del otro lado del bosque. Y ahora tengo que irme sino no llegaré hoy. Adiós señor lobo.

El lobo salió disparado. Corrió todo lo que pudo hasta llegar a la casa de la abuela. Llamó a la puerta.


- ¿Quién es? Preguntó la abuelita. Y el lobo, imitando la voz de la niña le dijo:

- Soy yo, Caperucita.
La abuela abrió la puerta y no tuvo tiempo de reaccionar. El lobo entró y se la tragó de un solo bocado. Se puso el gorrito de dormir de la abuela y se metió en la su cama para esperar a Caperucita. Caperucita, después de recoger algunas flores del campo para la abuela, finalmente llegó a la casa. Llamó a la puerta y una voz le dijo que entrara. Cuando Caperucita entró y se acercó a la cama notó que la abuela estaba muy cambiada. Y preguntó:
- Abuelita, abuelita, ¡qué ojos tan grandes tienes! Y el lobo, imitando la voz de la abuela, contestó:

- Son para verte mejor.
- Abuelita, ¡qué orejas más grandes tienes!
- Son para oírte mejor.
- Abuelita, ¡qué nariz más grande tienes!
- Son para olerte mejor.

Y ya asustada, siguió preguntando:
- Pero abuelita, ¡qué dientes tan grandes tienes!

- ¡Son para comerte mejor!
Y el lobo saltando sobre caperucita, se la comió también de un bocado.
El lobo, con la panza  totalmente llena acabó durmiéndose en la cama de abuela. Caperucita y su abuelita empezaron a dar gritos de auxilio desde dentro de la barriga del lobo. Los gritos fueron oídos por un leñador que pasaba por allí y se acercó para ver lo que pasaba.
Cuando entró en la casa y percibió todo lo que había sucedido, abrió la barriga del lobo, salvando la vida de Caperucita y de la abuela. Después, llenó piedras a la barriga del lobo y la cosió.
Cuando el lobo se despertó sentía mucha sed. Y se fue a un pozo a beber agua. Pero al agacharse la barriga le pesó y el lobo acabó cayendo dentro del pozo del que jamás consiguió salir.
Y así, todos pudieron vivir libres de preocupaciones en el bosque. Y Caperucita prometió a su mamá que jamás volvería a desobedecerla.


PATITO FEO.

En una hermosa mañana verano, los huevos que habían empollado la mamá Pata empezaban a romperse, uno a uno.
 Los patitos fueron saliendo poquito a poco, llenando de felicidad a los papás y a sus amigos
 Estaban tan contentos que casi no se dieron cuenta de que un huevo, el más grande de todos, aún permanecía intacto.
Todos, incluso los patitos recién nacidos, concentraron su atención en el huevo, a ver cuando se rompería.
Al cabo de algunos minutos, el huevo empezó a moverse, y luego se pudo ver el pico, luego el cuerpo, y las patas del sonriente pato. Era el más grande, y para sorpresa de todos, muy distinto de los demás. Y como era diferente, todos empezaron a llamarle el Patito Feo.

La mamá Pata, avergonzada por haber tenido un patito tan feo, le apartó con el ala mientras daba atención a los otros patitos. El patito feo empezó a darse cuenta de que allí no le querían. Y a medida que crecía, se quedaba aún mas feo, y tenía que soportar las burlas de todos. Entonces, en la mañana siguiente, muy temprano, el patito decidió irse de la granja.
Triste y solo, el patito siguió un camino por el bosque hasta llegar a otra granja. Allí, una vieja granjera le recogió, le dio de comer  y beber, y el patito creyó que había encontrado a alguien que le quería.

 Pero, al cabo de algunos días, él se dio cuenta de que la vieja era mala y sólo quería engordarle para transformarlo en un segundo plato. El patito salió corriendo como pudo de allí.
El invierno  había llegado, y con él, el frío, el hambre y la persecución de los cazadores para el patito feo.

Lo pasó muy mal. Pero sobrevivió hasta la llegada de la primavera

 Los días pasaron a ser más calurosos y llenos de colores. Y el patito empezó a animarse otra vez. Un día, al pasar por un estanque, vio las aves más hermosas que jamás había visto.



Eran elegantes, delicadas, y se movían como verdaderas bailarinas, por el agua. El patito, aún acomplejado por la figura y la torpeza que tenía, se acercó a una de ellas y le preguntó si podía bañarse también en el estanque.
Y uno de los cisnes le contestó:
- Pues, ¡claro que sí! Eres uno de los nuestros. 

Y le dijo el patito: 
- ¿Cómo que soy uno de los vuestros? 
Yo soy feo y torpe, todo lo contrario de vosotros. 
Y ellos le dijeron: 
- Entonces, mira tu reflejo en el agua del estanque y verás cómo no te engañamos.

El patito se miró y lo que vio le dejó sin habla. ¡Había crecido y se transformado en un precioso cisne! Y en este momento, él supo que jamás había sido feo. Él no era un pato sino un cisne. Y así, el nuevo cisne se unió a los demás y vivió feliz para siempre.


LA CENICIENTA.


Había una vez una bella joven que, después de quedarse huérfana de padres tuvo que vivir con su madrastra y las dos hijas que tenía ésta.

Las tres mujeres eran tan malas que se quedaban cada día mas feas. La bella joven era explotada por ellas. Era ella quien hacía todo el trabajo más duro de la casa. Además de cocinar, fregar, ella también tenía que cortar leña y encender la chimenea.

Así sus vestidos estaban siempre manchados de ceniza, por lo que todos la llamaban Cenicienta. Un día se oía por todas partes de la ciudad que el príncipe de aquel país había regresado.
El rey, muy contento, iba a dar una gran fiesta a la que iba a invitar a todas las jóvenes del reino, con la esperanza de que el príncipe encontrara en una de ellas, la esposa que deseaba.
En la casa de Cenicienta, sus hermanastras empezaban a prepararse para la gran fiesta. Y decían a Cenicienta:
- Tú, no irás. Te quedarás limpiando la casa y preparando la cena para cuando volvamos.
El día del baile había llegado.
 Cenicienta vio partir a sus hermanastras al Palacio Real y se puso a llorar porque se sentía muy triste y sola.

Pero, de pronto, se le apareció un Hada que le dijo:
- Querida niña, sécate tus lágrimas porque tú también irás al baile

Y le dijo Cenicienta:
- Pero, ¿cómo?, si no tengo vestido ni zapatos, ni carruaje para llevarme?
Y el hada, con su varita mágica, transformó una calabaza en carruaje, unos ratoncillos en preciosos caballos, y a Cenicienta en una maravillosa joven que mas se parecía a una princesa.



Y le avisó:
- Tú irás al baile, pero con una condición: cuando el reloj del Palacio dé las doce campanadas, tendrás que volver enseguida porque el hechizo se acabará.
Hermosa y feliz, Cenicienta llegó al Palacio. Y cuando entró al salón de baile, todos se pararon para mirarla.
El príncipe se quedó enamorado de su belleza y bailó con ella toda la noche.
Pero, al cabo de algunas horas, el reloj del Palacio empezó a sonar y Cenicienta se despidió del príncipe, cruzó el salón, bajó la escalinata y entró en el carruaje en dirección a su casa.
Con las prisas, ella perdió uno de sus zapatos de cristal que el príncipe recogió sin entender nada.
Al día siguiente, el príncipe ordenó a los guardias que encontraran a la señorita que pudiera calzar el zapato. Los guardias recorrieron todo el reino.
Todas las doncellas se probaron el zapato pero a nadie le sirvió.

Al fin llegaron a la casa de Cenicienta. Y cuando ésta se lo puso todos vieron que le estaba perfecto.
Y fue así cómo Cenicienta volvió a encontrarse con el príncipe, se casaron, y vivieron muy felices.

LA BELLA DURMIENTE

Hace muchos años, en un reino lejano, una reina dio a luz una hermosa niña. Para la fiesta del bautizo, los reyes invitaron a todas las hadas del reino pero, desgraciadamente, se olvidaron de invitar a la más malvada.
Aunque no haya sido invitada, la hada maligna se presentó al castillo y, al pasar delante de la cuna de la pequeña, le puso un maleficio diciendo: " Al cumplir los dieciséis años te pincharás con un huso y morirás".

Al oír eso, un hada buena que estaba cerca, pronunció un encantamiento a fin de mitigar la terrible condena: "Al pincharse en vez de morir, la muchacha permanecerá dormida durante cien años y sólo el beso de un buen príncipe la despertará."
Pasaron los años y la princesita se convirtió en una muchacha muy hermosa. El rey había ordenado que fuesen destruidos todos los husos del castillo con el fin de evitar que la princesa pudiera pincharse.
Pero eso de nada sirvió. Al cumplir los dieciséis años, la princesa acudió a un lugar desconocido del castillo y allí se encontró con una vieja sorda que estaba hilando.
La princesa le pidió que le dejara probar. Y ocurrió lo que el hada mala había previsto: la princesa se pinchó con el huso y cayó fulminada al suelo.
Después de variadas tentativas nadie consiguió vencer el maleficio y la princesa fue tendida en una cama llena de flores. Pero el hada buena no se daba por vencida.
Tuvo una brillante idea. Si la princesa iba a dormir durante cien años, todos del reino dormirían con ella. Así, cuando la princesa despertarse tendría todos a su alrededor.
Y así lo hizo. La varita dorada del hada se alzó y trazó en el aire una espiral mágica. Al instante todos los habitantes del castillo se durmieron.
En el castillo todo había enmudecido. Nada se movía, ni el fuego ni el aire. Todos dormidos. Alrededor del castillo, empezó a crecer un extraño y frondoso bosque que fue ocultando totalmente el castillo en el transcurso del tiempo.

Pero al término del siglo, un príncipe, que estaba de caza por allí, llegó hasta sus alrededores. El animal herido, para salvarse de su perseguidor, no halló mejor escondite que la espesura de los zarzales que rodeaban el castillo.
El príncipe descendió de su caballo y, con su espada, intentó abrirse camino. Avanzaba lentamente porque la maraña era muy densa. Descorazonado, estaba a punto de retroceder cuando, al apartar una rama, vio algo...
Siguió avanzando hasta llegar al castillo. El puente levadizo estaba bajado. Llevando al caballo sujeto por las riendas, entró, y cuando vio a todos los habitantes tendidos en las escaleras, en los pasillos, en el patio, pensó con horror que estaban muertos.
Luego se tranquilizó al comprobar que sólo estaban dormidos.
 "¡Despertad! ¡Despertad!", chilló una y otra vez, pero fue en vano. Cada vez más extrañado, se adentró en el castillo hasta llegar a la habitación donde dormía la princesa.
Durante mucho rato contempló aquel rostro sereno, lleno de paz y belleza; sintió nacer en su corazón el amor que siempre había esperado en vano.
Emocionado, se acercó a ella, tomó la mano de la muchacha y delicadamente la besó... Con aquel beso, de pronto la muchacha se despertó y abrió los ojos, despertando del larguísimo sueño.
Al ver frente a sí al príncipe, murmuró: “¡Por fin habéis llegado! En mis sueños acariciaba este momento tanto tiempo esperado". El encantamiento se había roto.
La princesa se levantó y tendió su mano al príncipe. En aquel momento todo el castillo despertó. Todos se levantaron, mirándose sorprendidos y diciéndose qué era lo que había sucedido.
Al darse cuenta, corrieron locos de alegría junto a la princesa, más hermosa 
. Al cabo de unos días, el castillo, hasta entonces inmerso en el silencio, se llenó de música y de alegres risas con motivo de la boda.